jueves, 11 de julio de 2013

El Reino de los Cielos está cerca


Santo(s) del día: San Benito Abad

Lectura del libro del Génesis (44,18-21. 23b-29; 45,1-5):
44:18 Judá se le acercó y le dijo. -Te suplico, mi señor, que permitas a tu siervo decir una palabra a oídos de mi señor; y no se excite tu ira contra tu siervo, pues eres como el faraón.
44:19 Mi señor preguntó a sus siervos. ¿Tenéis padre o algún hermano?
44:20 Respondimos a mi señor. Tenemos al padre anciano, y un hijo nacido en su ancianidad, el pequeño, cuyo hermano murió quedando él solo de su madre, y su padre le ama.
44:21 Entonces dijiste a tus siervos. Traédmelo, para verlo con mis ojos.
44:23 Tú insististe a tus siervos. Si no baja con vosotros vuestro hermano pequeño, no volváis a verme.
44:24 Cuando subimos a donde estaba mi padre, tu siervo, le contamos lo que había dicho mi señor.
44:25 Luego dijo nuestro padre. Volved a comprarnos algunos víveres.
44:26 Respondimos. No podemos bajar. Bajaremos si viene con nosotros nuestro hermano pequeño, pues no podemos presentarnos ante aquel hombre si nuestro hermano pequeño no viene con nosotros.
44:27 Pero mi padre, tu siervo, nos replicó. Vosotros sabéis que mi esposa me dio dos hijos;
44:28 el uno se alejó de mí y tuve que decir. Seguramente ha sido despedazado. Y yo no le he vuelto a ver.
44:29 Si os lleváis también a éste de mi lado y le ocurre alguna desgracia, haríais bajar, de aflicción, mis canas al sheol.
45:1 José ya no podía contenerse ante todos sus asistentes y ordenó. -Salid todos de mi presencia. Y no quedó nadie con él cuando José se dio a conocer a sus hermanos.
45:2 Al llorar levantó la voz, y lo oyeron los egipcios y la casa del faraón.
45:3 José dijo a sus hermanos. -Yo soy José; ¿vive aún mi padre? Sus hermanos no podían responderle, porque quedaron aterrados ante él.
45:4 Entonces José dijo a sus hermanos. -Acercaos a mí. Se acercaron y les dijo. -Yo soy José, vuestro hermano, el que vendisteis a los egipcios;
45:5 pero ahora no os preocupéis, ni os parezca odioso el haberme vendido aquí, pues Dios me envió por delante para vuestra salvación.
Palabra de Dios + Te alabamos Señor


Salmo (105) R/. Recordad las maravillas que hizo el Señor
Y trajo el hambre sobre aquella tierra, y cortó todo sustento de pan. Delante de ellos había enviado a un hombre, José, vendido antes como esclavo. R/
Le habían trabado sus pies con cadenas, y aplicado la argolla a su cuello, hasta el tiempo de que se cumpliera su oráculo, y de que la palabra del Señor le acreditará. R/
Entonces el rey mandó soltarle, el soberano de pueblos le dejó libre; le constituyó señor de su casa y gobernador de toda su hacienda R/


Lectura del santo evangelio según san Mateo (10,7-15): Gloria a ti Señor
10:7 Id y predicad: «El Reino de los Cielos está cerca».
10:8 Curad a los enfermos, resucitad a los muertos, sanad a los leprosos, expulsad los demonios. Gratuitamente lo recibisteis, dadlo gratuitamente.
10:9 No llevéis oro, ni plata, ni dinero en vuestras bolsas,
10:10 ni alforja para el camino, ni dos túnicas, ni sandalias, ni bastón, porque el que trabaja merece su sustento.
10:11 »En cualquier ciudad o aldea en que entréis, informaos sobre quién hay en ella que sea digno; y quedaos allí hasta que os vayáis.
10:12 Al entrar en una casa dadle vuestro saludo.
10:13 Si la casa fuera digna, venga vuestra paz sobre ella; pero si no fuera digna, que vuestra paz vuelva a vosotros.
10:14 Si alguien no os acoge ni escucha vuestras palabras, al salir de aquella casa o ciudad, sacudíos el polvo de los pies.
10:15 En verdad os digo que en el día del Juicio la tierra de Sodoma y Gomorra será tratada con menos rigor que esa ciudad.
Palabra del Señor + Gloria a ti Señor Jesús


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